
Hace unas semanas vimos la primera (y única, de momento) temporada de una serie un tanto chorra llamada Bedlam, algo así como Entre fantasmas a la inglesa y con protagonista masculino. Tras terminar Fringe, The Big Bang Theory y The Event sus respectivas temporadas, andábamos como vaca sin cencerro, y finalmente nos lanzamos a la aventura de este disparate llamado Misfits.
Unas alumnas de bachillerato me la recomendaron hace bastantes meses, pero claro, si te dicen que va de unos adolescentes que son delincuentes y que por una tormenta eléctrica tienen superpoderes... nada. Estando pendiente otras series en esos momentos, como que una pasa de darle una oportunidad. Me imaginaba algo parecido a la típica serie de niñatos que, al tener poderes, serían reclutados para hacer trabajitos y tal. Madre míaaa, nada que ver. Gracias a la insistencia de mi querida vintagechoes, forera de Historias de Época (sí, además de series de lords y ladies vemos otras cosas), nos pusimos mahn y yo a ello. Cuando vimos el primer episodio nos quedamos ojipláticos (como diría mi querida karah), alucinando. Una cosa así jamás la harían los americanos. No es que sea políticamente incorrecta: es lo siguiente.
Los protagonistas son un catálogo de personajes absolutamente demenciales, sobre todo tres de ellos: Nathan, el que se come la pantalla con un personaje bombón, bocazas, gamberro, malhablado, chulo... pero guapo y con gracia; Kelly, una poligonera made in England, que allí también las hay, y que habla un inglés que no lo entiende nadie; y Simon, un tipo extraño, con cara de desquiciado, la camisa abrochada hasta el último botón y una sonrisa que da hasta miedo a veces. Los otros dos, Alisha y Curtis, son correctos dentro de sus papeles. Alisha es una descarada y Curtis un joven y prometedor atleta que es pillado en asuntos de drogas, de forma que debe hacer servicios a la comunidad, igual que el resto.
Hasta noviembre no volverá una tercera temporada, que esperamos con ganas y con cierta pena (no digo por qué).
(En la imagen: Alisha, Curtis, Kelly, Nathan y Simon)