lunes, 31 de enero de 2011

Bond se queda sin su música

Bond, Memorias de África, Cowboy de medianoche, Bailando con lobos...


domingo, 30 de enero de 2011

Il italiano è una lingua molto facile e divertente

Estoy que no quepo en mí de gozo. Tooooda la vida estudiando inglés y ná. Tengo que esperar a que las amables foreras de Historias de Época vayan traduciendo los subtítulos en VO de Lark Rise to Candleford, porque no me entero, oiga. Sin embargo, me he arriesgado a seguir viendo Elisa di Rivombrosa en italiano sin subtítulos (no los hay para la segunda parte) ¡y me entero de todoooooo! Al menos en un 99,9%. Y sin estudiar nada de italiano in tutta la mia putanna vita.

sábado, 29 de enero de 2011

Un calorreo al año no hace daño






Esta semana me pedía el cuerpo algo distinto a las series inglesas. Mientras sigo con la cuarta y última temporada de Lark Rise to Candleford, he rescatado una producción italiana que me llamaba la atención. Me tiraba para atrás el hecho de tener que ver veintiséis episodios, pero me los he pulido casi de una sentada, aprovechando todos los huecos que he tenido. Hasta me llevé el ordenador al instituto un día que tenía que quedarme allí a comer y me vi un episodio entre las tres y las cuatro de la tarde, haciendo tiempo para un curso que tengo los miércoles a las cuatro y media.

La serie es Elisa di Rivombrosa, un folletín italiano, pero que tiene su cosa. La historia es la de siempre: una criada (Vittoria Puccini) que se enamora de su patrón, el atractivo Conde Fabrizio Ristori (Alessandro Preziosi). Aunque la atracción es recíproca, los comienzos son algo violentos y, después, todo son obstáculos a la relación. Además de la historia de amor ,tenemos una trama política, una conjura para matar al rey Carlos Manuel III de Saboya.

Junto a la pareja protagonista, es necesario que haya unos malos malísimos, en este caso el gobernador Ottavio Ranieri y la pérfida Lucrezia van Necker. Además, los secundarios que pueden estar o no del lado de los amantes. En fin: todos los ingredientes para enganchar. Una trama sin complicación pero no por ello sin intriga, unos protagonistas guapos y, lo más importante, pasión latina ante tanta represión británica. Que ver al galán de la serie despechugado es un gusto que no siempre tenemos. Fíjense si no por qué Colin Firth es el Darcy definitivo: por la famosa escena con la camisa mojada que a Jane Austen ni se le pasó por la cabeza.

Como nota final, decir que los actores principales se enamoraron durante el rodaje y eso se nota, desprenden química. Sin restar atractivo al calorro de Alessandro Preziosi, a mí me ha conquistado el personaje interpretado por Cesare Bocci: el del doctor Antonio Ceppi, un noble despreciado por los suyos al haber cometido la osadía de casarse con una criada.



No sé si haré el ánimo de ver la segunda parte y la secuela, titulada La figlia di Elisa-Ritorno a Rivombrosa. Ya les contaré.

miércoles, 19 de enero de 2011

El síndrome de "Gran Hermano"

Siempre he tenido la tentación de presentarme a un casting de Gran Hermano, pero para intentar comprobar una teoría que tengo. Resulta que, tras la primera edición de este reality, la cosa se ha desmadrado tanto (según me informa alguien que lo sigue) que todo el que entra en esa casa tiene que asimilar que gente cualquiera vaya a los programas surgidos en torno a este bodrio televisivo a contar cosas sobre los concursantes. Y no crean que es alguien cercano, padre, madre o similar, no. Es uno que fue a la escuela un año con el concursante de turno y, vaya por Dios, en esa época se comía los mocos y eso ha de saberlo la audiencia. Es posible que a los siete años esa persona gustara de regodearse en las bolillas extraídas de sus fosas nasales, menudo pecado. Parece algo inocente, pero no lo es, porque este ejemplo es una chorrada si lo comparamos con lo que sucede realmente, y aquí vengo a exponer mi teoría. Yo soy una persona normal, con una vida normal y hasta aburrida. No fumo, no bebo y no voy con mujeres malas. No me he dedicado a la prostitución en mis años mozos porque no había otra cosa, no he robado, en definitiva, una ciudadana corriente y moliente. Pero estoy segura de que todo sería entrar en el concurso y empezar a salir supuestos amigos o conocidos que afirman que soy lo peor, que les han dicho por ahí que yo conseguí mi trabajo tirándome al presidente de mi tribunal de oposición (quien, por cierto, era una señora, pero esa información no se contrasta)... En fin, que saldría de allí con toda una biografía tuneada y, cuidado, me tocaría probar mi inocencia, porque culpable ya sería a ojos de todo el mundo.

Pues esto es lo que hay. Difama, calumnia, que sale gratis y hasta puede ser que cobres por ello.

martes, 18 de enero de 2011

Echarle (literalmente) huevos al asunto

Como alguno de los lectores de este humilde blog ya sabe, soy profesora. Pero no por ello dejo de aprender cada día algo nuevo. En estos días pasados, he aprendido que la palabra "violencia" tiene distinto significado en función del contexto. Y me explico con dos bonitos ejemplos.

Se habla mucho de la "violencia en las aulas". Esto no quiere decir que a los profesores se nos pegue en un sentido estricto, que también, aunque es lo último, sino que el alumnado no nos respeta, nos insulta y nos graba con sus móviles para luego colgar esos vídeos en internet con la idea de divertir a los compis y seguir humillándonos. Esto, a mi juicio, es violencia contra un colectivo como el profesorado.

Ahora bien: he leído negro sobre blanco y firmado por un señor con nombres y apellidos que insultar y tirar huevos durante una manifestación no es violencia porque es una práctica normal en este tipo de actos. Además, tirar huevos es una metáfora de la fragilidad del manifestante frente a la fuerza de los poderosos. Todo muy bonito y muy poético. No sé ustedes, pero a mí no me sale hacer cosas así, por muy cabreada que esté. Lo que más me preocupa es que, siendo profesora, no sólo explico Historia o Geografía, sino que educo en valores, estoy todos los días diciéndole a los críos que insultar o agredir al compañero te quita toda la razón en cualquier discusión, que podemos llegar a un acuerdo sin cargar las tintas y sin despreciar al contrario. Me daría vergüenza que después me vieran en una foto, con la boca desencajada pegando gritos y lanzando airadamente huevos contra la fachada de una casa o, lo que sería peor, contra la cara de una persona.

lunes, 10 de enero de 2011

Don Juanito nos ha dejado


Con don Antonio y don Mariano la va a liar por allí arriba. Estará a la derecha del gran dios Matutano.

miércoles, 5 de enero de 2011

Doce meses para arreglar esto

Cerca ya de la hora en la que vendrán Sus Majestades de Oriente, doy por finalizada esta extraña Navidad. Han sido unas vacaciones largas, pero aderezadas con resfriados de ida y vuelta, toses desesperantes y fiebres que subían y bajaban. No he hecho absolutamente nada de lo que había planeado hacer estas semanas: buena manera de empezar el año. En fin... al menos ya ha vuelto V y con la mítica Diana como madre de la lagarta de Anna.

lunes, 3 de enero de 2011

La teoría del escupitajo mágico

Qué rollo que youtube no me deje poner el vídeo directamente. Vayan al enlace, que merece la pena ver este fragmento de Seinfeld.

http://www.youtube.com/watch?v=FrctUe_Yfdw