lunes, 30 de mayo de 2011

Misfits



Hace unas semanas vimos la primera (y única, de momento) temporada de una serie un tanto chorra llamada Bedlam, algo así como Entre fantasmas a la inglesa y con protagonista masculino. Tras terminar Fringe, The Big Bang Theory y The Event sus respectivas temporadas, andábamos como vaca sin cencerro, y finalmente nos lanzamos a la aventura de este disparate llamado Misfits.

Unas alumnas de bachillerato me la recomendaron hace bastantes meses, pero claro, si te dicen que va de unos adolescentes que son delincuentes y que por una tormenta eléctrica tienen superpoderes... nada. Estando pendiente otras series en esos momentos, como que una pasa de darle una oportunidad. Me imaginaba algo parecido a la típica serie de niñatos que, al tener poderes, serían reclutados para hacer trabajitos y tal. Madre míaaa, nada que ver. Gracias a la insistencia de mi querida vintagechoes, forera de Historias de Época (sí, además de series de lords y ladies vemos otras cosas), nos pusimos mahn y yo a ello. Cuando vimos el primer episodio nos quedamos ojipláticos (como diría mi querida karah), alucinando. Una cosa así jamás la harían los americanos. No es que sea políticamente incorrecta: es lo siguiente.

Los protagonistas son un catálogo de personajes absolutamente demenciales, sobre todo tres de ellos: Nathan, el que se come la pantalla con un personaje bombón, bocazas, gamberro, malhablado, chulo... pero guapo y con gracia; Kelly, una poligonera made in England, que allí también las hay, y que habla un inglés que no lo entiende nadie; y Simon, un tipo extraño, con cara de desquiciado, la camisa abrochada hasta el último botón y una sonrisa que da hasta miedo a veces. Los otros dos, Alisha y Curtis, son correctos dentro de sus papeles. Alisha es una descarada y Curtis un joven y prometedor atleta que es pillado en asuntos de drogas, de forma que debe hacer servicios a la comunidad, igual que el resto.

Hasta noviembre no volverá una tercera temporada, que esperamos con ganas y con cierta pena (no digo por qué).

(En la imagen: Alisha, Curtis, Kelly, Nathan y Simon)

7 comentarios:

Beatriz Alonso dijo...

Hola Athena dear, sigo tu blog desde hace tiempo y me encantan tus entradas!, hoy al leer tus comentarios sobre Misfits no he podido contener una carcajada porque me siento igual de alucinada con ésta serie, estoy asombrada de que me guste por las mismas razones que mencionas, asombrada pero enganchadísima, merece la pena ver a esos adolesecentes que se comen los prototipos y de paso echarse unas risas..
Un abrazo!
Bea.

Athena dijo...

Gracias por el comentario ;) La verdad es que la serie es todo un hallazgo. Son tan irreverentes, pero tan reales a la vez, que es normal que guste.
Nathan es algo así como el doctor House: nos reímos viéndolo en la tele, pero sufrirlos en la realidad, ja, ja, no quisiera yo. Por eso el nuevo coordinador de los chicos me encanta: es peor que ellos, je, je.

Un abrazo.

Nictea dijo...

Santo cielo... menos mal que tengo poco tiempo... jaja Bueno, si su graciosa divinidad le dio una oportunidad y no fue en vano, quizá no sea tan mala después de todo...

Athena dijo...

Bueno, no sé si sería de su gusto. Las burradas que sueltan son de tamaño olímpico. :P

loquemeahorro dijo...

Me pasó exactamente lo mismo que a ti: Vi el anuncio en MTV y pensé

"Oh, no, la enésima serie de adolescentes con poderes/vampiros/lo que sea"

Pero leí en "La tele que me parió" que aquello era harina de otro costal y ¡Qué sorpresa más agradable!

Y ahora esperaré ansiosa la siguiente temporada, después de decidir que mi favorita del mundo-mundial es Kellie y sus ojos mal pintados.

Hasta tolero a Nathan y eso que en los primeros capítulos pensaba "Dios, que su poder sea podera callarse"

Wen dijo...

esta serie está muy muy bien.

Yo pensaba igual, que sería la típica serieestúpida de niñatos americanos con super poderes.... pero..que vaa! :P jajaja


Y vaya! no sabes que sonrisa se me ha puesto en la cara cuando he leido tu entrada, que no estoy tan loca como creia, y que no soy la única que ve un sin fin de criaturas "Picassianas" en un trocito de baldosa!! jajajajaja

:D

Nictea dijo...

Me abstendré por temor a esas burradas olímpicas que mi vulnerable corazón decimonónico no podría soportar jajaja