lunes, 20 de octubre de 2008

Disparates finos

Viendo el nivelazo de las anteriores entradas sobre la lengua viva, dejo aquí dos ejemplos de menor alcance, pero con gracia.

Maestra, ¿para qué quiero yo aprender inglés si nunca voy a ir a Italia?

2º (Esto lo dijo una madre a la profesora de latín cuando, ya en septiembre, la hija volvió a suspender): ¿Cómo es posible que mi hija haya suspendido el latín, si ha estado todo el verano con una profesora nativa?

3º El alumno: "Maestra, ¿qué es eso de a priori?"
La profesora: "A priori es latín y significa que..."
El alumno: "Claro, como cuando vosotros érais jóvenes hablábais tan raro..." (supongo que esta profesora era la "nativa" que le dio clase a la otra alumna)

12 comentarios:

Antonio Sánchez dijo...

En 3º de Filología, me matriculé en Latín Medieval de Clásicas (extracurricular). Fui a González Palencia a comprarme un diccionario de latín medieval para traducir el Carmina Burana y cuando le dije a una de las que pululaba por la librería acerca del diccionario en cuestión y trar deambular de acá para allá en busca del antedicho glosario, se me puso delante y me dijo: "mira, tenemos diccionarios de latín antiguo y de la latín moderno, pero de medieval no nos quedan".
Siempre me quedará la duda de qué contendría ese diccionario de latin moderno...

Alberto dijo...

El asunto ese de las dependientas de las librerías da para mucho.

No es que pretenda que sean Menéndez y Pelayo ni nada de eso, pero de la misma manera que yo no me pondría a trabajar en una mercería o una ferretería, hay gente que no debería ponerse a trabajar con libros.

Cuanto una anécdota: siempre me ha agobiado mucho que los dependientes de las tiendas me persigan, me pregunten o me vigilen (lo hacen de una manera tan poco sutil, cuando te van siguiendo en la distancia por los pasillos...). En El Corte Inglés te dejan ir muy a lo tuyo y manosear los libros, pero en este de Cartagena andan un poco a la gresca las mozas por aquello de las comisiones.

El caso es que llevaba a una pisándome los talones por lo menos diez minutos. Como si fuera mi sombra. Incómodo y deseando quitármela de encima, entablé el contacto visual para que, ipso facto, acudiese. "Hola, ¿te puedo ayudar en algo?" (¿y por qué te tutea siempre esta gente?). Monísima la chica. Yo le respondo: "sí, sí que puedes. Mira, estoy buscando algún libro de algún autor de la corriente de la Poesía de la Experiencia, pero que no sea de los de siempre". Descolocada la pobre, se limitó a llevarme a uno de los pasillos de clásicos y, señalándome la estantería de Editorial Cátedra, me responde, apuradísima: "Algunos de los libros estos negros de aquí son de poesía... me parece". Y se fue, en plan tierra trágame.

Ni qué decir tiene que, cuando me ve por ahí (porque la jodía se acuerda, y yo de ella), ya no me buitrea ni me acosa. Será porque aún anda aclarándose con aquello de la poesía de la experiencia.

Athena dijo...

Don Joseph, qué malo es... pero no esperaba menos de usted. Si no me equivoco, mahn también ha recurrido alguna vez a algo parecido.

En las librerías del emporio Diego Marín, el que sabe del tema es precisamente Diego Marín. Yo también he tenido las mías con las zagalas que allí trabajan. Una vez fui a comprar "Las bodas de Fígaro" y a la dependienta en cuestión ni le sonaba lo de Fígaro (seguro que de pequeña no vio aquel famoso episodio de la Warner con Bugs Bunny cantando "El barbero de Sevilla"). Ni que decir tiene que el nombre del autor tuve que escribírselo yo en el ordenador, porque no había manera.

Estas cosas pasan también en secciones de música y cine. Pero desde aquí quiero romper una lanza por una dependienta del Corte Inglés de Gran Vía. Era la que llevaba lo del cine en tiempos de Galerías Preciados y en esa sección sigue. Ella sí que sabe y es lo que se espera de la persona que está allí. Porque, como dice Joseph, el que esté en sección lencería debe entender de copas, tirantes, tallas, etc. Y esta señora conoce todo sobre el cine. Y, además, también está al tanto de si han salido packs especiales, colecciones, etc... Siempre acudo a ella cuando estoy buscando cualquier cosa que pueda ser más rara. Que le tengo fe a la mujer, vamos.

sushi de anguila dijo...

Fantástico post, Athena, y divertidísimos los comentarios... Con los libros tan raricos que me gustan a mí (de aviones, de historia militar, de gastronomías extranjeras, de artistas de épocas pretérritas) más mi afición al cine clásico, digamos que he vivido en carne propia mil y una anécdotas similares que no os cuento para no provocaros le bostezo...

Me imagino a MAHN dándole un corte a lo Vila-Matas al/la desinformado/da de turno y es que me parto...seguro que se busca cosas más gordas que eso de la 'Poesía de la Experiencia', que me parece merecedor de un premio MAX para Mr Cartaphilus...

Alberto dijo...

Efectivamente, en el emporio Diego Marín había que ir a ver a Diego concretamente. De hecho, un grupo de amigos cuando aquello de la universidad íbamos de vez en cuando a la librería sólo a ver a Diego y a rendirle tributo. Ni a comprar, ni siquiera a hablar con él. Solamente a presentarle nuestros respetos.

Debo decir que la anécdota de la poesía de la experiencia es humorística, y nunca tuve la intención de humillar ni ridiculizar a la muchacha. Sólo que me agobia una barbaridad que me miren (lo cual intento compatibilizar como puedo con mi trabajo, con mucho sufrimiento).

Y complemento esto con otra anécdota ocurrida en Emporio Diego con una de sus muchachas. Iba yo a comprar "El retrato de Dorian Gray" (hacía tiempo que presté mi edición de bolsillo y había perdido la esperanza de devolución), pero, sorprendentemente, en Diego no estaba. La solícita dependienta me dijo, después de trastear el ordenador: "lo siento. De Gray no nos queda ningún libro".

La pregunta es si alguna vez les quedó algún libro firmado por el tal Gray.

Athena dijo...

Me cuenta mahn que fue en cierta ocasión a comprar "El tragaluz del infinito" y le sacaron mil y una versión de "El tragaluz" de Buero Vallejo. Y él diciendo que no, que ese libro no era...

Muy bueno lo de Gray, ja, ja.

sushi de anguila dijo...

Mondante la anécdota de Dorian Gray....ni escrita para un monólogo... Athena, para mí, cada vez que oigo la palabra 'Tragaluz' no puedo dejar de oir dentro de mi hueca cabeza este temazo que, con tu venia y el máximo cariño, le dedico a tu señor cónyuge... en recuerdo de épocas mejores... o, al menos juvenilmente más ingenuas...

http://es.youtube.com/watch?v=5tkxTWvmWic

Ramón Monedero dijo...

Bueno, yo mi comentario más coña no lo tengo en el apartado librerias. Cuando pregunto por algçun libro raro, generalmente me dicen que no lo tienen y después, tras una hora escudriñando la librería, a veces, he dado con el. Esto sobre todo en el Corte INgles, que ene fecto,s on todas muy monas, pero que cabezas dios mios. Fue de hecho en El Corte Ingles cuando, téniendo yo 15 ingenuos años, me disponía comprár la Banda Sonora Original de "Hook" de Steven Spielberg. La película será todo lo ñoña que queraís pero la música es una autçentica catedral del cine.
Así que llego, yo, me pongo a buscar y nada. Era un poco pronto para que la tuvieran, pero yo sabia de buena tinta que ya había salido a la venta. Total, que se me acerca una chica y me pregunta: ¿Te puedo ayudar? y yo, "si, si, estoy buscando la Banda Sonora de "Hook"?, y la chica me dice "¿Hook?, Robin Hook" (¿?) y yo absolutamente perpejo, "no, "Hook", la de Spielberg, la de el capitan garfio" y me responde la chica alegremente, "eso no existe".
Imagino que un par de semanas después, si la niña se detuvo a observar que esa BSo si existía, y con lo que se habló en su día de la pelí. En fin...
Yo, desde entonces, a El Corte INglés le tengo mucho "respeto", hay de todo, es verdad, hay gente muy efciciente que sabe de que le hablas, pero ahí sigue mi "respeto" generalizado.

jiujiu dijo...

Lol! you truly made my day!!!!

"1º Maestra, ¿para qué quiero yo aprender inglés si nunca voy a ir a Italia?"

:D :D

Athena dijo...

Dear Jiujiu: I understand now why you speak English so well, ja, ja, ja!!!

Antonio Rentero dijo...

De donde se deduce que en su juventud los italianos hoy de una cierta edad hablaban en inglés... si es que cada vez vienen más preparaos estos alumnos tuyos...

SI la categoría de un blog viene dada por la calidad de los comentarios de sus visitantes, lo de hoy eleva este blog a las alturas de la blogosfera, me he tenido que secar las lágrimas ante las divertidísimas anécdotas.... lo peor es que a los que os conozco os imagino en la situación y ya me descojono viendo en mi mente las caras que pondríais :-)

Cartaphilus, de monumento lo de "algún auor de la Poesía de la Experiencia... pero no de los de siempre" :-)

Mond dijo...

¿De dónde sacas estos disparates? ¡Son geniales!