jueves, 6 de marzo de 2008

Cariño

De nuevo oigo en la radio de mi coche algo que me deja patidifusa. Esta vez no es ningún disparate musical, sino pedagógico, lo que es peor y mucho más temible. Resulta "de que" una profesora ha hecho un estudio según el cual los alumnos se quejan de que no reciben cariño o afecto en las aulas por parte de los profesores. También de que no se les habla de estos conceptos, además del de respeto. Yo es que me parto. No comento la noticia porque supongo que cualquiera que lea esto sabrá por dónde irían los tiros: a la sien.

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