Por no hacer demasiado larga la anterior entrada, la he dividido en dos partes. Por otro lado, esta continuación merece su propio post.
Hablábamos de chicos malos, o cómo las mujeres nos perdemos por los duros de pelar, si se me permite la expresión. A este respecto, no he podido evitar pensar en dos de los héroes románticos por excelencia: Mr. Darcy y Mr. Rochester. Parece ser que existe un viejo debate sobre cuál de los dos es mejor. Verán que paso de Heathcliff, un borde sin fondo bueno que descubrir, enamorado de una auténtica veleta insoportable. Volviendo a nuestros dos caballeros (porque lo son en todos los sentidos), hagamos una disección de ambos:
Mr. Darcy: te gusta a pesar de que se te declare en contra de sus convicciones, porque no eres merecedora de su status social. Creo que es una buena estrategia, porque te hace volverte muy digna y pensar que qué se ha creído, aunque sospechas que algo bueno tiene (además de las 10.000 libras al año), ya que se ha rebajado a confesarte su amor. Así que te lanzas a investigarlo picada por la curiosidad y descubres que en el fondo tiene un corazón de oro, pero es muy cortado.
Mr.Rochester: te encanta su ironía, su sentido ácido del humor y, sobre todo, que te trate como a un igual, sin pensar en el qué dirán. Sin embargo, le gusta jugar con tus sentimientos un poquillo, hacerte creer que le atraen otras más de su clase y te vuelve loca, porque luego no para de decirte que le gustaría estar contigo en una isla desierta, que te echará de menos cuando te vayas, que le encanta hablar contigo... ¿En qué quedamos? Como decía una amigo mío, "eso es estar "pacá" y "pallá" y luego ná", aunque en este caso sí se llega a algo. Y sin perder un ápice de genio, que tienes que saber torear y ser más lista que él. Hay que entenderlo: a diferencia de Mr. Darcy, Mr. Rochester ha llevado una vida más dura y carga con un secreto que lo hace más misterioso aún. Ya el colmo que te hace rendirte es que grite tu nombre a través de los páramos porque te echa de menos...
Si alguien lee este post y tiene algún duro-romántico que aportar, se admiten sugerencias. Mi cultura literaria no es lo suficientemente amplia y me dejo muchísimos héroes a los que desconozco, pero aporto los que he disfrutado y me han hecho disfrutar.
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3 comentarios:
Acertadísimo análisis, como siempre, Ahtena, de los dos héroes románticos y duros por excelencia pasando de Heathcliff.
A mí también me queda mucho por leer. En la novela que te comenté en mi blog, Norte y Sur de Gaskell (tengo la edición de Alba Editorial, me encanta esa colección), Thornton no es un chico malo. Más bien niña bien del sur que al principio desdeña al empresario emprendedor demasiado burgués del norte. Yo creo que te gustará. ¿Cómo es el protagonista de Dos ciudades?
Estaba intentando hacer memoria pero me vienen algunos de los personajes de las novelas de Daphne de Maurier (Rebeca, Jamaica Inn) que están basados en el Rochester de Charlotte Bronte (en este ordenador no sé poner los dos puntos). Hombres atormentados con esposas locas en el desván y heroínas a las que les atrae el lado oscuro.
Rebeca me lleva inevitablemente al cine y a Hitchcock y, por tanto, a mi peli favorita, Notorius-Encadenados. Menudo tratamiento de frialdad que le da el personaje de Cary Grant a la Bergman cuando están sentados en el banco, al darle ella el parte y cuando ya está medio enferma.
Y también a las grandes parejas del cine, tipo Rhett y Scarlett. Me ha gustado la precuela/secuela que ha hecho Donald McCaig del libro de Lo que el viento se llevó de Mitchell. Sin embargo la de Alexandra Ripley me pareció un bodrio-culebrón de cuidado. Y es que Escarlata se merece un chico malo malo.
Ahora quiero conocer a George Eliot. Me compré hace un mes Middlemarch, pero no he podido leerla todavía.
Bueno, otro chico malo que me gustó en el cine fue el protagonista del Velo pintado, la película de Edward Norton y Naomi Watts. Luego leí el libro en el que está basado, de Somerset Maugham, y vi que los personajes originales eran más bordes y recorosos. La peli está mucho más edulcorada, parece que por el propio Norton, que fue productor.
Y nada más, por ahora... lo que nos está dando estos temas. Me encaaaantan.
Prefiero que descubras a Sydney Carton cuando leas "Historia de dos ciudades". Yo sólo he llorado dos veces con el final de un libro: "Jane Eyre" y éste. Y eso que, antes de leerlo, había visto una miniserie basado en él, pero me emocioné igual. A lo mejor luego te parece un rollo, pero el trasfondo no puede ser más atractivo: la revolución francesa. Cuando lo leí estaba en COU y también me había leído "Los pilares de la tierra". Ya sé que no tienen nada que ver, pero me gustó mucho. Imagínate mis apuntes de, por ejemplo, Filosofía, llenos de dibujitos de hombres de despeinada cabellera y vestidos al estilo del siglo XVIII, y también de chavalillos medievales y monjes benedictinos. Manías que le dan a una.
En cuanto a "Rebeca", sólo te digo que casi me ponen ese nombre por la película (mis padres son unos cinéfilos también, de ahí me viene). Me gusta mucho la versión de Hitchcock, con esa Mrs. Danvers que no camina, se desliza. No he leído la novela, pero seguro que la película no la desmerece. Y de Hitch me encanta "Con la muerte en los talones" y "Vértigo". Bueno, es que Cary Grant y James Stewart son dos de mis superfavoritos.
La verdad es que soy un rato anárquica a la hora de leer. Es por donde me da. Ahora, por ejemplo, estoy con "La suma de los días" de Isabel Allende (me la regalaron hace casi un año, por mi cumpleaños). Esta autora ni me va ni me viene. Me gustó mucho su "Hija de la fortuna", pero ya no me preguntes qué pasa en la novela porque no me acuerdo. No se me quedan sus historias, y eso que es buena narradora. Por otro lado, he hecho la colección de Agatha Christie y de vez en cuando me leo uno. Como ves, no soy fiel en cuanto a la literatura.
"El velo pintado" fui a verla por Edward Norton, pero me dejó fría, la verdad. He visto que uno de tus libros favoritos es "Rojo y negro". Sonará a blasfemia, pero no me gustó. Otra blasfemia: no he terminado "Cien años de soledad". ¿Merezco ir a la hoguera? Ja, ja, ja.
P.D.: espero que mahn sea como Rochester, excepto en lo de la loca en el ático :P
Ja, ja... por supuesto que no (lo de loca en el desván). Confieso ser una voyeur de No (ha) lugar desde hace casi dos años. Me lo descubrió mi hermano. Y ha sido sólo en las últimas semanas que me topé con tu Blog y punto, qué grata sorpresa. Me gusta muchisísimo.
Por cierto, con lo la entrada de hoy de MAHN y en relación al manitas se merece o bien que le pegues una colleja o bien que le tomes la palabra :p
Qué gracia con lo de Rebeca. Pero me gusta más tu nombre de verdad, Athena ;)
Ya me gustaría ver tus dibujos. Ya ves que no suelto la caricatura que me hiciste. No sabes el cariño que le tengo. Curioso lo del dibujo de Dos Ciudades.
Cary Grant y James Stewart merecen que les hagas una entrada.
Y en cuanto a Rojo y Negro, como Anna Karerina, Crimen y Castigo, Maupasant y demás fue más de la época de los veranos alrededor de los quince, cuando deboraba la literatura clásica. Los de Allende me parecen todos parecidos. Yo me habré leído un par. Era muy triste el que dedicó a su hija, Paula, me regaló el libro mi amiga Stefania.
Me encanta e inevitablemente me voy a lo que más me gusta, que para eso uno lee, para evadirse y disfrutar. Evadirse sobre todo de la literatura especializada que no tienes más remedio que leer por el trabajo. De ahí lo de las novelas policiacas y la literatura de mujeres de tintes románticos. Yo también merecería ir a la hoguera por no haber leído algunos clásicos imprescindibles.
Estoy pensando que te voy a dedicar una entrada sobre Jane Eyre y tu adorado Rochester. Yo es que últimamente estoy más por Knightley y Wentworth. Y otro día haré otra de los X Files, aunque ya sé que es tu hermana la que era más fan.
Bss
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